Los bares de Cambrils amenazan con cerrar por la ley antitabaco

JUDIT PINAZO | 26/01/2011

Los bares de Cambrils está en pie de guerra. El motivo, las pérdidas económicas de casi un 50% desde la entrada en vigor de la ley antitabaco. Al importante descenso de los ingresos debido a la crisis ahora se les suma la pérdida de clientes motivada por la nueva normativa. Unas pérdidas que cada vez van a más y que temen acabe con un gran número de bares en Cambrils. Por este motivo, y con el objetivo de unir esfuerzos y buscar alternativas, el pasado martes medio centenar de propietarios de bares y cafeterías del municipio se reunieron para plantear y debatir propuestas contra la entrada en vigor de la ley. En la reunión, según explica Juan Antonio Blanco, asesor de Cambrils y uno de los impulsores del encuentro, también asistieron propietarios de estancos y de maquinas recreativas del municipio, ambos sectores, también muy afectados por la normativa.

Aunque el encuentro fue una primera toma de contacto con los afectados, el objetivo es que éstos se constituyan como asociación. «Queremos trasladar nuestra preocupación a la Associació d’Hosteleria de Cambrils, para recabar apoyo, concretar acciones conjuntas y establecer contactos con otras asociaciones de igual naturaleza del resto del estado», asegura.

La situación límite que aseguran estar viviendo los propietarios de bares hizo que se hayan empezado a proponer algunas acciones de protesta. La más contundente, la amenaza de cierre de sus locales durante una semana. «De aquí dos semanas nos volveremos a reunir y si se aprueba por mayoría cerraremos. También nos hemos planteado desconectar las máquinas de tabaco e incluso la insumisión a la ley», asegura Blanco.

El objetivo final es intentar una reforma de la ley que admita de nuevo locales para fumadores y no fumadores o que contemple la posibilidad de habilitar salas destinadas únicamente a los fumadores. «En países como Holanda o Grecia lo consiguieron y nosotros vamos a intentar luchar para defender el sector. Para ello, nos uniremos a cualquier iniciativa legislativa popular que proponga la reforma de la ley», comenta.

‘Voy a tener que cerrar’

Las perspectivas de futuro de los propietarios de bares no pueden ser peores. La ley antitabaco ha supuesto un descenso de casi la mitad de los ingresos que hacen temer la no continuidad de muchos negocios. Es el caso del Bar Restaurante El Morter. «Antes cerraba cada día a las 23.00 horas y desde enero a las 21.00 horas ya no tengo nadie en el bar. La gente no viene a consumir ni a hacer la tertulia con los amigos si saben que tendrán que fumar en la calle. Si continuamos así me veré obligado a cerrar», explica Francisco Rodríguez, propietario de El Morter. Lo que no puede ser –añade– «es que por culpa de una ley como esta cada día tenga más pérdidas y que los impuestos sigan siendo los mismos».

Jordi Tomàs, del bar Can Jordi, coincide en afirmar que el futuro de su negocio está complicado. «Con la crisis no podemos hacer nada, pero con la ley sí. No creo que fuera el mejor momento para ponerla en marcha», comenta. Y es que según Tomàs, la medida es innecesaria teniendo en cuenta que ya existían los bares sin humo. «¿Si el cliente ya podía elegir de qué sirve esta medida en los tiempos que corren?», pregunta.