Que estamos en una precampaña encubierta no cabe ninguna duda, solo basta con observar las vallas publicitarias, no aparecen en algunos casos la foto de político de turno, pero en la mayoría ya hace alusión directa al oponente, lo que en marketing publicitario se denomina publicidad agresiva.
Toda esa agresividad que practican en las cámaras nuestros políticos, también la llevan a la calle, y esperemos a la campaña en sí, será todo un esplendor de poderío y derroche, tiempo al tiempo.
Por eso, desde este ciberespacio quiero reclamar de una vez por todas limitar el dinero que destinan los partidos a campañas electorales. Deberían proponer por ley limitar el gasto a 45.000 euros para las próximas elecciones autonómicas, las catalanas las tenemos a la vuelta de la esquina, pero ¿qué partido limitará su gasto?
Es todo demagogia pura y dura rebajar el sueldo de los políticos, si estos a su vez derrochan con toda clase de propagandas para atraer el voto.
Plataforma Cívica Ciudadanía
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