BLANCO, Y EN BOTELLA.

Ayer saltaba a todos los medios las declaraciones de José Blanco Ministro de Fomento, y digo bien, porque el anuncio que el Gobierno pretende incrementar la presión fiscal, según el propio Ministro de Fomento, para mantener unas infraestructura y servicios de primera, creo y no soy un experto que este tipo de profecías correspondería al Ministerio de Economía, o a el mismísimo Presidente del Gobierno.

Claro que a lo mejor las declaraciones del Sr. Blanco las hizo como número dos del PSOE, y ¿Qué ha sido del número uno?, se reserva solo para las buenas noticias, porque de eso igualmente estamos desprovistos, lo mismo que servicios de primera, Sr. Blanco.

Ahora toca pagar la hipoteca del sus derroches y dilapidar dinero a espuertas, poner sobre la mesa medidas necesarias por no haber actuado a tiempo y negar una crisis por su propios intereses partidistas para mantenerse en el Gobierno, un gobierno sin rumbo y con pésimo pregonero. Ahora nos toca ser solidarios al resto de los ciudadanos que estamos soportando una presión fiscal de la más alta de Europa, Sr. Blanco.

Se está demostrando que somos el país que menos crecemos y no tenemos credibilidad en los mercados internacionales para colocar deuda y gozar de liquidez. El Gobierno de España sigue despachándose, ahora con aquello de los brotes verde, antes con el cheque regalo y en la última campaña, por el pleno empleo, lo próximo que será, vuelva usted mañana a ver que se nos ocurre esta noche.

Está claro que los ciudadanos tenemos un lastre que no nos deja crecer, igualmente con la sobrecarga de Ministros que los mismo valen para un roto, para un descosio, o como vocero de número uno, nos costará el doble que al resto de europeos. Decía Wistons Churchil, cada país tiene los políticos que se merece, pero creo que los españoles no somos tan malos para merecer unos políticos así, precisamente.

Francisco G.P.